Hace unas semanas hablábamos de cómo hacer campañas de email marketing exitosas, pero tal vez te preguntes cómo medir ese éxito. Si es así este post es para ti, porque vamos a explicar cuáles son los KPI más importantes para medir el éxito de las acciones de email marketing.

Como sabes, una vez que ponemos cualquier acción de marketing es indispensable hacer un seguimiento de los resultados, para realizar los ajustes necesarios y seguir mejorando para conseguir tus objetivos de marketing. Y para ello utilizamos distintos KPI (“Key Performance Indicators” o indicadores de clave de rendimiento) que nos dirán si logramos un objetivo o no.

Y según cuáles sean nuestros objetivos, utilizaremos distintos indicadores. En el caso del email marketing, los KPI más relevantes son los siguientes:

  • Tasa de apertura. Ya lo mencionamos en el post de los consejos de email marketing, porque es uno de los indicadores más importantes para comprobar el éxito de un email.  También es la métrica más conocida y nos dice cuántos usuarios han abierto el email, entre todos a los que se les ha enviado. Es un indicador básico, ya que para que opara conseguir el resto de los objetivos es fundamental que los usuarios abran el email. Una forma de mejorarla es utilizar un asunto atractivo, pero que sea realista y adecuado para el contenido (además de que abran el email, también nos interesa que interactúen con él y vayan más allá).
  • CTR (Click Through Rate) o Tasa de clics. El CTR es el porcentaje de usuarios que hacen clic en los enlaces de los emails. Es una métrica muy interesante para medir el interés de los usuarios en los contenidos que ofrecen nuestras newsletters.
  • Tasa de conversión. Es el porcentaje de usuarios que hicieron clic y completaron la acción (objetivo) correspondiente en tu web o landing page: comprar un producto, suscribirse a una jornada, descargarse un catálogo…
  • Tasa de rebote. Es el porcentaje de emails enviados que no se han podido entregar al usuario. Puede haber distintos motivos para que un email no se entregue y se dividen entre rebotes leves (errores temporales como un problema de servidor o un buzón lleno) o rebotes duros (estos errores son permanentes -por ejemplo, una dirección que no existe- por lo que nunca se podrán entregar los emails). Una tasa alta de rebotes duros, nos indica que hay que depurar la lista de contactos: eliminar direcciones duplicadas y obsoletas, corregir erratas… De lo contrario, corremos el riesgo de que la plataforma de envío nos penalice.
  • ROI: Es el acrónimo en inglés de «Return Of Investment»; es decir, «Retorno de la Inversión», en español.  En definitiva, el ROI es un indicador que nos ayuda a medir el rendimiento de nuestras campañas de email marketing en base a la inversión realizada (por ejemplo, lo que pagas por la plataforma) y los resultados obtenidos. Puedes echar un vistazo a este post sobre cómo calcular el ROI de tus acciones de marketing online.
  • Tasa de emails compartidos: El porcentaje de usuarios que han compartido el contenido del email (que han hecho clic en el botón de compartir en redes sociales o «enviar a un amigo»). Es un dato positivo, porque el hecho de que los usuarios lo compartan, nos permite llegar a nuevos usuarios que no están en nuestra base de datos. Una forma de conseguirlo es utilizar llamadas a la acción para animar a los usuarios a compartirlo.
  • Tasa de crecimiento de la lista de email: Mide la velocidad a la que crece tu lista de suscriptores. Para calcularlo cogemos el número de nuevos suscriptores y le restamos el número de bajas (incluidas las quejas por spam): dividimos el resultado entre el número de suscriptores y lo multiplicamos por cien.

Además de estos KPI, también podemos obtener otros datos, como la tasa de bajas o de denuncias de spam, pero en realidad, tampoco son las más relevantes para medir el éxito de nuestras campañas y no deberíamos cegarnos en exceso. En el caso de la tasa de bajas, hay que tener en cuenta que gran parte de los usuarios que pierden el interés en una newsletter, no llegan a darse de baja y simplemente dejan de abrir nuestros emails, por lo que para medir el interés es preferible centrarnos en la tasa de apertura, de clics o de conversiones… Asimismo, el miedo a perder suscriptores nos puede llevar a ocultar o dificultar el proceso de baja; pero esto puede ser contraproducente, ya que podrían marcarnos como spam y esto sí que podría traernos penalizaciones por parte de la herramienta.

Si quieres que te echemos una mano desarrollando tus campañas de email marketing o analizando sus resultados, no lo dudes y ¡contacta con nosotros!

Publicado por Overalia

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