Vender, vender y vender
Piensa que tu web es un comercial que debe estar dotada de objetivos y tiene que vender. Midiendo cómo ejerce esa labor comercial podrás optimizar la web para mejorar sus resultados.
La subjetividad es tu peor enemigo. Analiza y toma las decisiones en base a datos objetivos.
Piensa en la interactividad del usuario: clics = conversiones = objetivos = rentabilidad. La analítica web te sirve para auditar qué funciona y qué no. Es tu mejor aliado.
Controla los costes y mide el impacto de cada una de las acciones que lleves a cabo.
Tienes que imputar todos los costes en tu proyecto: diseño, contenidos, campañas, seguimiento, costes internos. Te va a ayudar a valorar esfuerzos. Define un periodo de amortización y un coste mensual que te permita gestionar el retorno de inversión de tu proyecto y segmentarlo por campañas, productos, zonas geográficas, segmentos de usuarios.
Define objetivos claros y medibles.
Segméntalos por prioridades y orden de importancia. Haz una oferta clara y sencilla. Cruza la obtención de objetivos con parámetros de segmentación (usuarios, medios, creatividades, contenidos, etc.).
El contenido es primordial para lograr tráfico hacia tu web. Analízalo de manera exacta.
Los contenidos son la materia prima de tu web. Debes hacer uso de herramientas que te permitan determinar si tus contenidos son válidos para lograr tus objetivos. Prueba entre distintos mensajes para decidir cuáles son los que mejor funcionan.
Analiza todas tus fuentes de tráfico. Tienes que sacarles el máximo provecho.
Realiza un seguimiento de todas tus acciones de promoción web. Has de conocer cuáles son las más rentables para así decidir de manera acertada tus próximas inversiones.
Haz pruebas. Tu web tiene que estar en beta permanentemente.
Utiliza el A/B Testing de contenidos para ver qué mensajes, ofertas, imágenes y diferentes estrategias se convierten mejor en objetivos. Rentabilizas la inversión de tus campañas. Utiliza Web Site Optimizer de Google. Es gratis.
Personaliza la información. No pierdas el tiempo con datos que no necesitas.
Los informes de seguimiento lo son todo. Personaliza un sistema de reporte que te permita
gestionar tu retorno de inversión. Distribuye los informes en función de los roles de cada uno
(cliente y proveedor). Qué palabras clave, qué campañas, qué tipos de usuarios. ¡¡Toma las decisiones!!
Automatiza los procesos mediante procedimientos. Deja que te ayude un experto.
Al principio vas a necesitar ayuda para definir objetivos, cómo medirlos, definir indicadores, utilizar una plataforma analítica, asimilar y gestionar los resultados. No lo intentes hacer sólo. No es rentable.
Que no te entre el pánico. Relájate.
Las cosas son mucho más sencillas de lo que parecen, cuando se conocen. Las herramientas son gratuitas. Con la ayuda adecuada y un poco de tiempo podrás gestionar estos 10 puntos. Sólo necesitas ayuda al principio.
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